viernes, 18 de febrero de 2022

1º BACH - COSMOLOGÍA GRIEGA

 

 


            ¿Qué es una cosmovisión? Una teoría (una explicación global y total) del universo físico, de la naturaleza, del cosmos (“cosmos” es una palabra que utilizaban los griegos para referirse a aquello que hoy en día denominamos “universo”; “cosmos” significa literalmente “orden”).

            Dos han sido las grandes cosmovisiones que se han tenido en el pensamiento occidental acerca del mundo físico:

La cosmovisión de los antiguos: es decir, la de los filósofos griegos; estuvo vigente durante 22 siglos (desde el siglo VI a.C. hasta el siglo XVI d.C., es decir, desde los griegos hasta el Renacimiento incluido).

La cosmovisión de los modernos: es decir, la cosmovisión propia de la ciencia moderna. Esta nueva concepción de la naturaleza hizo su aparición en el siglo XVII (Revolución científica: Kepler, Galileo, Descartes, Newton…) y es la aún vigente en la actualidad. La concepción científica de la naturaleza ha variado tanto en los últimos 150 años (desde 1850), que en ocasiones se habla de dos cosmovisiones científicas:

a)      La mecanicista: la cosmovisión que estuvo vigente desde 1600 hasta 1850.

b)      La cosmovisión científica contemporánea: la que es propia de nuestros días y que comenzó a elaborarse allá por 1850 (esta nueva concepción es la evolucionista, cuántica y relativista de la naturaleza).

De todo lo que vamos a explicar seguidamente, lo más importante que debemos entender es que la comprensión del universo físico propio de los antiguos (de los filósofos griegos) y la comprensión del universo de la ciencia moderna es radicalmente distinta y, en muchos aspectos, opuestas entre sí.

¿A qué se debe este cambio radical en la manera de entender lo que sea el universo físico? ¿Es que acaso los filósofos griegos y los científicos modernos no percibían una misma realidad?

La razón de esta disparidad de concepciones de la realidad es efecto de la aparición, de la invención, en la segunda mitad del siglo XVI de una nueva ciencia, una ciencia que los griegos prácticamente desconocían (en realidad ya la conocían, pero la aplicaban sólo en ámbitos muy específicos).

¿Qué ciencia? La ciencia que estudia la materia, mejor dicho (porque en realidad no estudia la materia), la ciencia que estudia el movimiento de la materia y las fuerzas que lo producen. Y que además, realiza este estudio del movimiento y de las fuerzas desde una perspectiva matemática.

 ¿Cuál es el nombre de esta ciencia, de esta ciencia geométrica de la naturaleza? La Física. Pero no la física de los antiguos (como la física de Aristóteles) que no era matemática, sino la física de los modernos, la física-matemática moderna, la MECÁNICA.

Volvamos a hacernos la pregunta. ¿Por qué los griegos y los modernos comprenden el universo físico de modos tan distintos? Los griegos comprendieron el universo físico de un modo muy distinto a como lo hacemos los modernos porque no lo comprendieron desde la perspectiva de la mecánica. Por el contrario, la comprensión moderna es el resultado de explicar la realidad a través de los ojos de la mecánica.

La cosmovisión de los griegos

Sobre la concepción que del universo físico tenían los griegos, debemos saber lo siguiente:

1º Los filósofos griegos no tenían una única teoría acerca del universo físico sino múltiples cosmovisiones, algunas de las cuales son muy similares entre sí, pero otras muy dispares (al contrario de lo que sucede en el mundo moderno, donde sólo hay una cosmovisión del universo: la de la ciencia moderna).

¿Qué cosmovisiones?

A)     La cosmovisión matematicista de los pitagóricos

B)     La cosmovisión materialista de los atomistas (de Demócrito)

C)      La cosmovisión idealista de Platón

D)     La cosmovisión naturalista (esencialista) de Aristóteles

E)      La cosmovisión panteísta del estoicismo

Todas estas cosmovisiones mantienen una visión diferente acerca del Cosmos. Sin embargo, entre todas ellas hay muchos puntos en común, con la excepción del atomismo democriteano.

Expliquemos en 1º lugar la cosmovisión atomista. El atomismo reduce la realidad a átomos y vacío (corpúsculos de materia moviéndose en un espacio vacío). Todo lo que existe en el universo (el mundo mineral, los astros, las plantas, los animales, incluso el alma del hombre) es el resultado del movimiento de los átomos y su combinación.

El atomismo fue la primera cosmovisión puramente materialista de la historia (materialismo= doctrina metafísica, no científica, según la cual no existe nada más que la materia). Sin embargo, no tuvo ningún éxito. Sólo los epicúreos la profesaron. El resto de las escuelas filosóficas (el pitagorismo, el platonismo, el aristotelismo y el estoicismo) rechazaron el materialismo propio del atomismo e incluso lo combatieron. ¿Por qué? El resto de las escuelas consideraban que el universo físico y sobre todo su orden (a ese orden es a lo que los griegos denominaron cosmos; como ya dijimos anteriormente, “kosmos” significa “orden”) no puede ser explicado en términos corpóreos (en términos puramente materiales, es decir, como átomos y vacío) y de ahí que se requieran otros principios explicativos (principios explicativos no corpóreos). ¿Cuáles?

A)     Para los pitagóricos: los números.

B)     Para Platón y los platónicos: las Ideas (para Platón, las Ideas se ubican fuera del mundo físico, en un mundo suprafísico, metafísico: el mundo de las Ideas).

C)      Para Aristóteles y la escuela peripatética (significa “los paseantes”): la naturaleza de los seres (a la naturaleza de los seres, por ejemplo, a la naturaleza de una planta que la hace reproducirse mediante semillas, Aristóteles también la denomino “forma”, “esencia” y “substancia”).

D)     Para los estoicos: el Logos o Espíritu cósmico.

El atomismo democriteano resurgirá con una extraordinaria fuerza cuando en el siglo XVII sea reivindicado por la ciencia moderna como la concepción filosófica correcta acerca del universo físico (es la teoría corpuscular mantenida en el siglo XVII por Richard Boyle y Pierre Gassendi; no confundir esta versión moderna del atomismo, la teoría corpuscular, que es la principal doctrina filosófico-científica de la ciencia moderna, con la teoría atómica de Dalton, que es simplemente una teoría química).

¿En qué términos describen los griegos el universo físico?

El universo es esférico: es una enorme esfera, y tiene forma esférica porque es perfecto y pleno (la esfera es el cuerpo geométrico perfecto).

El universo está estructurado como una sucesión de esferas homocéntricas. ¿Qué esferas? Dichas esferas están hechas de una materia especialísima denominada éter, la quinta esencia o quinto elemento (los otros cuatro elementos son: la tierra, el agua, el aire y el fuego). En la Edad Media imaginaban estas esferas de éter como si fuesen de cristal. En cada esfera está engastada, como si de una gema se tratase, cada uno de los astros. ¿Qué astros? La Luna, el Sol (que para los griegos no era una estrella) y los cinco planetas que se pueden contemplar a simple vista: Mercurio, Venus, Marte, Júpiter y Saturno. Finalmente, las 1022 estrellas, ni una más ni una menos, se ubican en una única y última esfera, la esfera de las estrellas fijas (los astrónomos griegos organizaron las 1022 estrellas en 48 constelaciones; además, no consideraban la Vía Láctea como un cúmulo de estrellas. ¿Qué es la Vía Láctea? Un fenómeno meteorológico, como los cometas, emanaciones y efluvios que se producen en las capas altas de la atmosfera).

3º Porque tiene una forma definida, esférica, el universo es finito (no infinito, como será el universo moderno). Al ser finito, el universo tiene un límite irrebasable. ¿Cuál es el límite del universo? La esfera donde se encuentran las 1022 estrellas que podemos observar a simple vista en el firmamento. A esta esfera, el confín del universo físico, la denominaron “la esfera de las fijas”.

El universo es eterno: existe desde siempre y perdurará por siempre. Además, no cambia, no evoluciona (como defendemos los modernos), es decir, no puede aparecer en él nada nuevo. ¿Por qué? Porque para los griegos, el universo esta hecho, es una obra rematada (no está “haciéndose” como creemos hoy en día en virtud de teorías como el evolucionismo darwiniano o la cosmología del Big Bang). Es por ello por lo que, frente a la concepción evolucionista darwiniana del mundo orgánico, hoy en día denominamos a la concepción griega (no evolucionismo sino) fijismo (ya que las especies son fijas, permanentes, inalterables).

5º En el centro del universo se ubica la Tierra (la Tierra no es por ello un planeta, un astro). El universo de los griegos es geocéntrico. También es geoestático: las esferas que componen el universo, las esferas celestes, están en movimiento. La única esfera que no se mueve es la Tierra. Toda la física de los antiguos se construyó sobre este axioma (sobre este principio o afirmación fundamental). De ahí que el copernicanismo, que defiende el movimiento de la Tierra como un planeta, más implicase la refutación de toda la física de los antiguos.

El movimiento de las esferas celestes es perfecto (matemática y geométricamente perfecto: un movimiento circular y uniforme). En los cielos todo es eterno, nada cambia (con la excepción de ese movimiento perfecto del que hablábamos antes), nada nace y perece, nada se crea y se destruye (como, por el contrario, no deja de suceder en la Tierra, donde todo es efímero), nada deviene. Por ello, porque los cielos son eternos y perfectos, es por lo que los cielos son divinos, un ámbito superior y perfecto de la realidad. Finalmente, ¿qué mueve los cielos? Los cielos son movidos por “Inteligencias”, una por cada esfera (Aristóteles llegará a postular la existencia fuera del cosmos físico de una inteligencia perfecta, el theos, que se constituye como el gran motor del universo y que lo mueve pensándose a sí mismo; a este “noesis noeseos”, a este pensamiento autopensante lo denomina el Primer Motor Inmóvil).

La Tierra, el “mundo elemental” (se contrapone al “mundo celeste”, al constituido por las esferas celestes de éter), se configura también como una serie de esferas concéntricas, una por cada uno de los cuatro elementos (los cuatro elementos son las substancias más simples; es resto de substancias, las substancias mixtas, son el resultado de la combinación de estos cuatro elementos). Pues bien, en el centro del mundo terrestre se encuentra la esfera del elemento “tierra” (una esfera que está en reposo absoluto y de ahí el geoestatismo; esa esfera es lo que hoy en día denominamos “geósfera”). Por encima de ella, se encuentra la esfera del elemento “agua” (los océanos; la “hidrósfera”). Después nos encontramos con la esfera del aire (la “atmósfera”) y finalmente con la esfera del fuego que colinda con el primer cielo, el cielo o esfera lunar (la Vía Láctea, los cometas… eran fenómenos “meteorológicos”, fenómenos que se producían en la zona de contacto entre la esfera del aire la esfera del fuego; “meteoro” significa en griego “elevado por encima del suelo”).

La heterogeneidad de la región celeste y la región terrestre: con respecto a la estructura del cosmos (es decir, respecto a cómo se organizan y distribuyen las distintas esferas que lo componen), lo más importante que tenemos que saber es que el cosmos no es homogéneo (como defenderá la ciencia moderna) sino heterogéneo. ¿Por qué? Porque en el cosmos hay dos regiones claramente diferenciadas: la región celeste y la región terrestre (a cada una de ellas le corresponde una física distinta: la física celeste o astronomía a los cielos y la física terrestre a la Tierra; como veremos más adelante, para la ciencia moderna no hay dos regiones diferenciadas ya que el universo es homogéneo y por ello sólo habrá una física: la mecánica).

Jerarquía cósmica: estas dos regiones están además jerarquizadas, es decir, ordenadas en relación a su mayor o menor perfección: los cielos son una región perfecta ya que todo lo que allí hay (las esferas y los astros) es eterno. Además, el movimiento de los cuerpos celestes es también perfecto por ser un movimiento uniforme, circular y eterno. La región terrestre es un ámbito inferior, es el reino del devenir, de lo que nace y perece: es el reino de lo efímero (de lo que no es eterno). Además, el movimiento de los cuerpos terrestres no es circular sino rectilíneo (ascendente o descendente; por ello, de un modo natural y no violento, forzado, las piedras caen y los gases y el fuego ascienden). Además, dicho movimiento no es uniforme (los graves, los cuerpos pesados, aceleran al caer; algo inexplicable para la física de los antiguos hasta el punto de convertirse en la crux del aristotelismo).

NOTA LITERARIA: la más famosa obra literaria del espectáculo divino de las esferas celestes son los Cantos intermedios de la Divina Comedia de Dante; Fray Luis de León, al contemplar los cielos, se refería a ellos en los siguientes términos: “Morada de grandeza/Templo de claridad y hermosura”).

Explicación griega acerca del dinamismo del universo

Pasemos seguidamente a explicar cómo concebían los filósofos griegos el funcionamiento, el dinamismo del universo (de todo lo que vamos a explicar de la cosmología de los antiguos, ésta es la parte más interesante, la más importante, aunque también la más difícil de entender).

El organicismo

Normalmente se dice que los griegos tenían una concepción organicista del universo, es decir, que concebían a éste como si de un ser vivo se tratase. El universo era concebido como un gran animal, como un descomunal organismo animado por un alma que lo dotaba de vida, sensibilidad e, incluso, inteligencia.

El paradigma organicista griego se contrapone tópicamente al paradigma mecanicista moderno: el universo concebido no como un ser vivo sino como una máquina. Vamos seguidamente a explicar popr qué razón la mayoría de los filósofos griegos mantuvieron esta concepción organicista y de todos los seres o sustancias que lo componen (desde las rocas, pasando por las plantas, animales y hombres, hasta los cuerpos celestes).

Los griegos querían llegar a entender el dinamismo del universo. 

¿Por qué una piedra cae por sí sola, aunque nadie la empuje a caer? ¿Por qué un imán atrae al hierro? ¿Por qué llueve? ¿Por qué el fuego calienta y quema? ¿Por qué las semillas germinan y los árboles florecen? ¿Por qué los animales se aparean con miembros de su misma especie y del sexo contrario al suyo? ¿Por qué los seres humanos piensan o viven en polis? ¿Por qué los cuerpos celestes se mueven con un movimiento uniforme, circular y eterno? 

Los griegos habían observado que la mayoría de los movimientos eran naturales, es decir, espontáneos, no forzados (por ejemplo, una piedra cae por sí misma ya que nada la empuja a caer; por ello, este movimiento espontáneo es natural, todo lo contrario que ese otro movimiento, el movimiento de un proyectil, el movimiento de esa misma piedra cuando la lanzo lejos, que es un movimiento forzado, “violento” lo denominarán, ya que la piedra no se mueve por sí misma sino por la acción de quien la arroja). Pues bien, a los filósofos griegos lo que más les interesaba llegar a comprender son los movimientos naturales (no los movimientos violentos o mecánicos), aquellos que una cosa realiza espontáneamente por sí misma (en virtud de su naturaleza intrínseca). 

Para explicar este tipo de movimientos naturales, los filósofos griegos postularon la existencia dentro de las cosas de principios activos que son los causantes de dichos movimientos. Estos principios activos los denominaron de diversas maneras, pero la más importante es la de naturaleza, la “naturaleza de un ser” (ej., esa naturaleza es aquello a lo que nos referimos cuando por ejemplo afirmamos que es propio de la naturaleza del agua hervir a 100 grados). Esa naturaleza era denominada en ocasiones “alma”, fundamentalmente en el caso de aquellas sustancias que eran capaces de desenvolver un comportamiento más complejo y perfecto: plantas, animales, hombres y astros (como veremos más adelante, todo el pensamiento científico moderno se construye sobre la negación de este axioma del pensamiento antiguo: para la ciencia moderna, dentro de los cuerpos no existe ningún tipo de principio activo, pues no existen  los principios activos internos a la materia ya que esta es absolutamente inerte tal como declara el principio de inercia).

La teleología del movimiento

La segunda característica de la concepción griega acerca del dinamismo del universo, es que el movimiento tiene carácter teleológico. 

¿Qué significa “teleológico”? 

Es un adjetivo que se aplica a todo aquel proceso (a todo movimiento o actividad) que está orientado hacia un fin. 

¿Por qué está orientado hacia un fin? 

Porque responde a un propósito ya que dicho movimiento está planificado de antemano. Y justamente por eso, porque responde a un plan preestablecido, ese movimiento está orientado (se dirige a) hacia un fin (“fin” en griego se dice “telos”, y de ahí lo de “teleológico”), hacia la consecución de una meta, de un objetivo preestablecido: el movimiento se dirige hacia la consecución de un estado que se constituye como el estado final del proceso.

Un ejemplo de actividad teleológica la tenemos en la conducta humana: las cosas que hacemos las hacemos siempre para con ello lograr alcanzar un estado de cosas final que nos resulta deseable. 

¿Para qué estudiamos? 

Algunos responderán que para aprobar, otros que para aprender, pero siempre tiene que haber un “para qué” de la actividad que desenvuelvo. Ese “para qué” es el fin, el objetivo o telos hacia el que se orienta o dirige mi actividad de estudiar. Por el contrario, cuando un individuo actúa sin razón, sin motivo (es decir, sin fin, sin telos, sin para qué), de él sólo podemos decir que actúa de ese modo porque está loco, porque ha perdido el juicio y la cordura. Como hemos visto a través de este ejemplo, la acción humana es teleológica y resulta incomprensible si no la interpretamos desde esta perspectiva (la perspectiva teleológica).

Pues bien, como acabamos de ver, una actividad teleológica es todo aquel proceso o cambio que se produce orientado hacia un fin, hacia la consecución de un determinado estado, el estado final del proceso. En el mundo moderno, sólo explicaremos desde esta perspectiva teleológica la actividad humana. 

¿Por qué? 

Porque para la ciencia moderna, todo el dinamismo de la naturaleza carece de teleología. Pero los filósofos de la Antigüedad tenían al respecto una opinión completamente diferente. Para ellos, todo lo que sucede en la naturaleza (todos los movimientos naturales, no aquellos que denominamos violentos o “contranatura”) son movimientos teleológicos, movimientos orientados hacia un fin. 

¿Dónde es más fácil observar esa teleología de la naturaleza? 

En el mundo de los seres vivos. Ejemplo: ¿Por qué crecen los árboles? Para florecer y fructificar, para alcanzar ese estado final de completa maduración que hace posible su reproducción (la producción de semillas que podemos encontrar dentro del fruto es el telos, es el fin de la actividad vital que despliega la planta). Otro ejemplo, 

¿Por qué construyen nidos las aves? 

Para así proteger mejor a sus polluelos de los depredadores. Pero los filósofos también descubrían esta teleología en ámbitos diferentes a la biología. Aristóteles, por ejemplo, consideraba que la causa de la caída de los cuerpos pesados (de la caída de una piedra) era que estos buscaban su “lugar natural”, su fin, el lugar en el que ya sí podían reposar: el centro del universo. Para Aristóteles (y para el resto de filósofos griegos), la teleología más admirable del universo era la que podemos contemplar en los cielos. Como sabemos, para los griegos el movimiento de los cuerpos celestes era eterno, uniforme y circular. Aristóteles se preguntó por qué los cielos se mueven así. Esa pregunta, para ser respondida, debía ser reformulada en términos teleológicos: 

¿Para qué los cielos se mueven así? ¿Cuál es la meta de este movimiento, el estado final de dicho movimiento? 

En caso de que no hubiese fin, el movimiento de los cielos sería irracional, carecería de sentido (lo cual lo haría incomprensible). Pues bien, para poder encontrar un fin que diese sentido al movimiento de los cuerpos celestes, Aristóteles postuló que en una dimensión suprafísica, transfísica, metafísica de la realidad (metafísica significa literalmente más allá del universo físico), existe una entidad que es el telos del movimiento celeste: esa entidad es el theos (es decir, dios; Theos=dios en griego, y de ahí lo de “teología”. Dios es el fin del universo, de su movimiento. 

¿Por qué dios es el fin del movimiento de las esferas celestes? 

Porque con su eterno y regular girar, las esferas imitan la perfección del pensamiento autopensante (noesis noeseos) en que consiste la divinidad. Y gracias a dicho movimiento ordenado de los cielos, se producen los ciclos de la naturaleza, el sucederse del día y la noche y  el ciclo de las estaciones, ciclos que tienen su origen en los movimientos de las esferas celestes. Y gracias a ello, el universo físico se ordena a sí mismo y se autoconstituye como un Cosmos.

NOTA: como podemos comprobar, el concepto de mímesis, de “imitación”, es fundamental para la comprensión metafísica de la realidad ya que lo inferior imita a lo superior que es lo perfecto y pleno.

El porqué de esta teleología universal

Terminemos nuestra explicación acerca de la comprensión teleológica del movimiento característica de los filósofos griegos, explicado la razón última de dicha teleología (supra, es decir, más arriba, hemos explicado sólo la razón última del movimiento de los cuerpos celestes, no del universo entero: imitar la perfección divina). La razón última de esta teleología universal, de esta teleología que es propia de todas las cosas que hay en el universo (no sólo de los cielos) es que el estado final al que tiende todo ser natural es alcanzar el pleno desenvolvimiento de su naturaleza.

Ejemplo: todas las complejas actividades vitales que desenvuelve una planta de nutrición, crecimiento y reproducción tienen como objetivo final el que la planta florezca y fructifique, el que la planta alcance su total madurez como planta, el pleno desenvolvimiento de su naturaleza de planta, su perfecto desarrollo como planta. Y es en ese momento, sólo en ese momento, cuando la planta podrá reproducirse, estando preparada no sólo para producir una copia de sí misma (un ejemplar individual más al fin y al cabo de una especie natural) sino para transferir a ese nuevo individuo su propia naturaleza, la naturaleza “planta”, que logrará de ese modo perpetuarse en el tiempo, no perecer al igual que los individuos, ejemplares efímeros de la especie, y ser así eterna).

jueves, 17 de febrero de 2022

2º BACH - 1º COMENTARIO LOCKE

 




Pero, aunque ese estado natural sea un estado de libertad, no lo es de licencia; aunque el hombre tenga en semejante estado una libertad sin límites para disponer de su propia persona y de sus propiedades, esa libertad no le confiere derecho de destruirse a sí mismo, ni siquiera a alguna de las criaturas que posee, sino cuando se trata de consagrarla con ello a un uso más noble que el requerido por su simple conservación. El estado natural tiene una ley natural por la que se gobierna, y esa ley obliga a todos. La razón, que coincide con esa ley, enseña a cuantos seres humanos quieren consultarla que, siendo iguales e independientes, nadie debe dañar a otro en su vida, salud, libertad o posesiones; porque, siendo los hombres todos la obra de un Hacedor omnipotente e infinitamente sabio, siendo todos ellos servidores de un único Señor soberano, llegados a este mundo por orden suya y para servicio suyo, son propiedad de ese Hacedor y Señor que los hizo para que existan mientras le plazca a Él y no a otro. Y como están dotados de idénticas facultades y todos participan en una comunidad de Naturaleza, no puede suponerse que exista entre nosotros una subordinación tal que nos autorice a destruirnos mutuamente, como si los unos hubiésemos sido hechos para utilidad de los otros, tal y como fueron hechas las criaturas de rango inferior, para que nos sirvamos de ellas. De la misma manera que cada uno de nosotros está obligado a su propia conservación y a no abandonar voluntariamente el puesto que ocupa, lo está asimismo, cuando no está en juego su propia conservación, a mirar por la de los demás seres humanos y a no quitarles la vida, a no dañar ésta, ni todo cuanto tiende a la conservación de la vida, de la libertad, de la salud, de los miembros o de los bienes de otro, a menos que se trate de hacer justicia a un culpable.

J. LOCKE; Ensayo sobre el gobierno civil,


EL TEXTO NO CORTADO LO ENCONTRARÉIS EN LA PAGINA DE LA CIUG-HISTORIA DE LA FILOSOFÍA. BUSCAD ESTA PÁGINA Y LUEGO PINCHAD DONDE PONE TEXTOS/LOCKE/TEXTO 1º

INSTRUCCIONES PARA HACER EL COMENTARIO

1º CONT. BIO-BIBLIOGRÁFICA: lOCKE (VIDA Y OBRA)

2º CONT. HISTÓRICA: GUERRAS CIVILES EN INGLATERRA + REVOLUCIÓN GLORIOSA DE 1688

3º CONT. FILOSÓFICA: EL CONTRACTUALISMO DE HOBBES COMO NUEVA TEORÍA POLÍTICA

4º GLOSARIO: SÓLO LOS TÉRMINOS SUBRAYADOS EN EL TEXTO

1º BACH - LECTURA: LAS GRANDES IDEOLOGÍAS POLÍTICAS







 LAS GRANDES IDEOLOGÍAS POLÍTICAS

La siguiente lectura la vamos a dedicar a explicar dos cosas que están estrechamente relacionadas:

1º Daremos cuenta de las principales ideologías políticas del mundo moderno:

a)      - El liberalismo

b)     -  El socialismo

Estas son las dos principales ideologías políticas, pero hay otras:

c)     -  El conservadurismo o tradicionalismo

d)     -  La democracia cristiana

Además, hay idearios políticos como el nacionalismo que se centran en cuestiones políticas muy concretas y que no se pueden vincular directamente con el pensamiento político de derechas ni de izquierdas. Por otro lado, tenemos que tomar en consideración que algunas de estas ideologías políticas, como ocurre por ejemplo con el socialismo, tienen dentro de sí múltiples variantes como por ejemplo los socialdemócratas, los comunistas, los anarquistas, etc.

2º Profundamente vinculada con la cuestión anterior es qué debemos entender por cada una de las tres grandes ideas (o ideales) políticos del mundo moderno: igualdad, libertad y solidaridad (fraternidad). De lo que se trata es de dilucidar, aclarar, de qué igualdad estamos hablando, de qué libertad y finalmente de qué clase (y en qué grado) de solidaridad. Como veremos en próximas clases, las diferencias entre las distintas ideologías políticas son efecto de una distinta concepción de lo que sea la igualdad, la libertad y la solidaridad.

            Nuestro punto de partida en este recorrido por las grandes ideologías en el mundo moderno será el de una oteada panorámica de todas ellas, dejando para más adelante el análisis más pormenorizado de cada uno. Las tres grandes familias ideológicas en el mundo moderno son:

  1. El conservadurismo.                2º. El liberalismo.                        3. El socialismo.


EL CONSERVADURISMO

¿Qué es el conservadurismo? ¿En qué creen los conservadores? ¿Qué modelo de sociedad defienden?

Ser conservador significa:

1º Creer en el valor de la tradición: para los conservadores todas las instituciones sociales y políticas que hemos heredado de nuestros antepasados son buenas. ¿Por qué? Porque son el resultado de las experiencias exitosas de las generaciones que nos precedieron en el tiempo (dichas instituciones son el precipitado de la historia). Para un conservador, el pasado no es sinónimo de obsolescencia (de que algo está anticuado y ya no sirve para nada) sino de experiencia exitosa ya probada. En esto consiste la lógica conservadora.

2º Tener una concepción organicista de la sociedad. Para los conservadores, la sociedad es como un gran organismo vivo en el que cada una de las distintas clases o estamentos sociales (como si de un órgano del cuerpo social se tratase) cumple una función específica: la función del pueblo llano sería la producción de bienes y servicios económicos y la de las clases dirigentes (la élite o aristocracia social) dirigir y cuidar al conjunto de la comunidad.

Y es que, para los conservadores, la sociedad debe ser como una “gran familia”: no una mera asociación de individuos sin vínculos entre ellos más allá del interés propio (algo así como un gran club), sino una verdadera comunidad (una gran familia), una comunidad orgánica en la que las clases dirigentes cumplen la función de padre solícito (cariñoso, atento, responsable y abnegado si llegase el caso) y las clases subordinadas la de hijos obedientes, esforzados y disciplinados. Por todo ello, es normal que el conservador tenga una concepción de la política paternalista y autoritaria.

El partido conservador más importante de la historia (aunque su ideología hoy en día case poco con lo que acabamos de contar acerca del conservadurismo) es el Partido Conservador británico. Se les denomina oficiosamente “torys”, contraponiéndolos a los “whigs” que son los liberales. Además de ellos, desde finales del siglo XIX, en el Parlamento británico también está presente el Partido Laborista, el partido de los trabajadores (antes de la II Guerra Mundial, el poder se lo disputaban el partido conservador y el partido liberal; desde que terminó la II Guerra Mundial, el poder se lo disputan el partido conservador y el partido laborista).


EL LIBERALISMO (1º APROXIMACIÓN)

¿Y el liberalismo?

El liberalismo es, sin lugar a dudas, la ideología política moderna por excelencia.

¿Qué concepción de la sociedad tienen los liberales? ¿En qué creen?

Los liberales creen en el individuo: un individuo libre y responsable que se siente el único verdadero dueño y señor (propietario) de su vida. El liberalismo es, por lo tanto, individualista.

¿Y la sociedad?

Para los liberales, la sociedad no es una comunidad (una gran familia) sino una simple asociación de individuos (un gran club).

¿Qué tipo de asociación?

Una asociación de hombres libres (ciudadanos) que han decidido vivir juntos para cooperar libremente y defender sus intereses comunes.

Lo más importante que debemos saber sobre los liberales es que para ellos el MERCADO (el mercado es el lugar donde los individuos ejercen su derecho a intercambiar, a comprar y vender, libremente lo que quieran) es la principal institución sobre la que se sustenta una sociedad libre.


EL SOCIALISMO (1º APROXIMACIÓN)

¿Y los socialistas?

Si el liberalismo era la reacción a los males del absolutismo del Antiguo Régimen (fueron las revoluciones liberales del siglo XVIII y XIX quienes llevaron a su fin al Antiguo Régimen), el socialismo será la reacción a los males y problemas sociales que surjan en la nueva sociedad liberal (la nueva sociedad industrial capitalista).

El socialismo considera que el liberalismo político (el liberalismo) y el liberalismo económico (el capitalismo) van siempre de la mano ya que, en realidad, son la misma cosa (las dos caras, la cara política y la cara económica, de una misma moneda: la sociedad capitalista).

            La idea clave para entender el socialismo es la siguiente: la sociedad capitalista es, aparentemente, una sociedad libre y justa. Pero ello es falso, es una mentira: la gran mentira. En realidad, frente a la aparente libertad y prosperidad que genera la sociedad capitalista moderna, ésta es la sociedad más opresiva y depauperante (empobrecedora) de la historia.

¿Cómo es esto posible?

Porque la libertad que existe en el capitalismo (y su gran cuartada ideológica, el liberalismo) es la libertad sin restricción alguna de explotación del hombre por el hombre.

¿Por qué abogan los socialistas?

            Desean el surgimiento de una sociedad más igualitaria (y también más solidaria) que la desigualitaria, injusta, insolidaria sociedad capitalista. Para lograr estos loables fines es inevitable limitar la libertad de los individuos. Hay muchas formas de socialismo, pero podemos, para empezar, agruparlos en dos grandes grupos:

  1. El socialismo reformista (el socialismo democrático, el socialismo que acepta las reglas de juego de la democracia liberal, constitucional y parlamentaria).
  2. El socialismo revolucionario (el socialismo autoritario y antiliberal).

El socialismo surgió en las primeras décadas del siglo XIX (Francia, Inglaterra 1830-1840). En principio, durante todo el siglo XIX y la primera mitad del siglo XX (hasta la 2º Guerra Mundial), la forma de socialismo predominante fue el socialismo revolucionario (todos los grandes partidos socialistas de aquel entonces defendían de un modo u otro la revolución (sólo había una excepción: el partido socialista inglés, el Partido Laborista, que nunca fue revolucionario). Pero desde finales de la 2º Guerra Mundial hasta la actualidad, la práctica totalidad de los partidos socialistas se han hecho reformistas (reunidos en 1951 en Bad Godesberg, la plana mayor del SPD, el partido socialista alemán, renunció definitivamente a las vías revolucionarias para alcanzar el poder; lo mismo hicieron el resto de partidos socialistas europeos; el último en hacerlo fue en 1977 el PSOE por el retraso que en esta puesta al día del socialismo conllevó el franquismo).

Pasemos ahora a explicar con mayor detalle estas ideologías políticas a los que añadiremos (si nos da tiempo) otro par de credos políticos que han tenido un gran predicamento en el mundo moderno: el nacionalismo y la democracia cristiana.


EL NACIONALISMO POLÍTICO

A)     Con respecto al nacionalismo, hay que saber que, al igual que ocurre con el socialismo, hay diferentes tipos:

-          Un nacionalismo que reivindica derechos territoriales (derecho a independizarse como un nuevo Estado soberano) de regiones integradas en estados ya constituidos y consolidados como tales (un ejemplo de ello, lo tenemos en la independencia de Irlanda del Reino Unido tras la 1º Guerra Mundial u, hoy en día, en la reivindicación de una parte de la población catalana de su derecho a decidir si separarse del resto de España para constituirse como una república independiente). Este nacionalismo es político (porque su reivindicación es política) pero busca una justificación cultural o histórica (étnica o lingüística: los irlandeses no son ingleses por ser católicos etc., o los catalanes no son españoles porque no son castellanos, es decir, castellanoparlantes, etc.; para algunos, la justificación histórica es, en realidad, pseudohistórica).

-          Otro tipo de nacionalismo estatalista que sirve de ideología aglutinadora de la población de un Estado moderno (un ejemplo de ello lo tenemos en el nacionalismo francés)

B)     Dentro del grupo ideológico conservador, debemos hacer una referencia al margen acerca de la democracia cristiana.


LA DEMOCRACIA CRISTIANA

¿Qué es la democracia-cristiana? La principal ideología conservadora surgida tras la II Guerra Mundial.

¿Dónde hizo su aparición?

En aquellos países que habían perdido la guerra como Alemania o Italia, o que se habían aliado con las potencias del Eje (como la República de Vichy, es decir, Francia).

En estos países, la mayoría de las fuerzas conservadoras habían colaborado, incluso simpatizado, con el fascismo y el nazismo, lo cual, después de la guerra, las convertía en sospechosas. Pues bien, los demócrata-cristianos eran conservadores, pero en ningún momento habían manifestado la más mínima simpatía por el fascismo e incluso, en la medida de lo posible, se habían opuesto a él. Eran, por lo tanto, en dichos países, la única fuerza conservadora fiable y que no requería pasar por un proceso de desnazificación. 

Además, en el contexto de la Guerra Fría contra la Unión Soviética, para Estados Unidos era muy importante que Alemania, Francia e Italia no estuviesen gobernados por partidos socialistas o comunistas (ya que un gobierno socialista, no digamos ya comunista, podía simpatizar con la URSS, con el peligro de desequilibrio que ello supondría en el frágil orden mundial posterior al final de la II Guerra Mundial). Pues bien, los demócrata-cristianos eran inequívocamente anticomunistas y, por lo tanto, se convirtieron en el principal muro de contención para que el comunismo prosoviético (incluso la social-democracia antes de abandonar definitivamente el marxismo revolucionario) no alcanzase el gobierno en las jóvenes y aún frágiles nuevas democracias italiana, francesa y, sobre todo, alemana.

¿Quiénes fueron los principales líderes de la democracia-cristiana en los años inmediatamente posteriores al final de la guerra, es decir, entre 1945 y 1965?

-          En Francia: Robert Schuman (no confundirlo con el músico Robert Schumann).

-          En Italia: Alcide De Gasperi

-          En Alemania: Konrad Adenauer (el canciller de la nueva República Federal de Alemania).

¿Por qué es importante que conozcamos sus nombres?

Porque fueron ellos los que idearon y crearon la Unión Europea (la Unión Europea es el gran proyecto político de la democracia-cristiana, proyecto al que luego también se sumaría con entusiasmo la socialdemocracia).

El Día de Europa celebra cada 9 de mayo la paz y la unidad del continente. La fecha es el aniversario de la histórica declaración de Schuman. En un discurso pronunciado en París en 1950, el ministro francés de Asuntos Exteriores, Robert Schuman, expuso su idea de una nueva forma de cooperación política que hiciera impensable un conflicto bélico entre las naciones europeas. Ese fue el punto de arranque de la Unión Europea.

¿Cuál es la ideología política de la democracia-cristiana?

La democracia-cristiana se denomina así porque hace suyo la doctrina social católica y la ética social protestante.

Para ellos, tan importante es la existencia del libre mercado (como defienden los liberales) como el que el Estado se encargue de dispensar una serie de servicios sociales fundamentales (sanidad, educación y protección social) que protejan a los individuos de las adversidades que puedan padecer (crisis económicas, enfermedad, vejez, pandemias) y permita que estos, como las personas que son, puedan vivir siempre con dignidad.

Es decir, defienden un  modelo político-social mixto, la denominada “economía social de mercado”: una economía de mercado libre (economía capitalista liberal) cuyos desequilibrios son compensados por un Estado que provee a los ciudadanos de una serie de servicios sociales básicos, es decir, una economía de mercado eficiente. Esta es la base ideológica sobre el cual se ha construido el Estado del bienestar actual.

¿Cuáles son los partidos demócrata-cristianos más importantes?

El partido demócrata-cristiano más influyente y relevante del mundo es la CDU. La CDU es el partido que en más ocasiones ha gobernado Alemania desde el final de la II Guerra Mundial (con breves paréntesis en que Alemania fue gobernada por el SPD, por el partido socialista alemán o partido socialdemócrata alemán). Este partido es una de las claves de la estabilidad de Alemania (y de la Unión Europea) desde 1945.

En Italia, la Democracia Cristiana italiana gobernó el país hasta la década de los noventa del pasado siglo, hasta que el país cayó en manos de gobernantes populistas (el primero fue el empresario Silvio Berlusconi).

En Francia, la democracia cristiana tuvo una gran relevancia durante la IV República y se integró dentro del gaullismo con el advenimiento de la V República.

En España, la democracia cristiana estuvo integrada dentro de la UCD (el partido de Adolfo Suárez que pilotó la transición de la dictadura franquista a la democracia) hasta 1982, y desde entonces forma parte de la gran constelación ideológica conservadora del Partido Popular (el PP).

EN CONCLUSIÓN: Respecto a la democracia cristiana, nos basta con saber que los partidos demócrata cristianos son aquello cuya ideología está inspirada por la doctrina social (y política) de las grandes iglesias cristianas: fundamentalmente la Iglesia Católica y la Iglesia Evangelista alemana. Los dos países en que estos partidos han tenido mayor relevancia han sido, siempre después de la 2º Guerra Mundial, Italia (donde gobernaron ininterrumpidamente desde 1945 hasta la década de los 90 del pasado siglo) y Alemania (donde gobiernan ininterrumpidamente en Baviera y a los que se puede atribuir la creación de la República Federal de Alemania).


EL LIBERALISMO (2º Y DEFINITIVA APROXIMACIÓN)

El liberalismo, la tradición liberal, ha sido, sin lugar a dudas, la ideología política más importante y, hasta cierto punto, dominante en el mundo moderno (el mundo moderno comprende desde el siglo XVII hasta la actualidad). Es por ello por lo que podemos considerar al liberalismo no sólo una ideología política sino la ideología política por antonomasia del mundo moderno (hasta el punto de identificarla también con la concepción del ser humano y de la sociedad, con la filosofía, propia del mundo moderno).

            Dentro del liberalismo, a diferencia de lo que ocurre con el socialismo, no hay diferentes familias, diferentes maneras de entender el ideario liberal. Lo que sí que hay es una larga tradición que da comienzo a finales del siglo XVII (en 1688 en Inglaterra) y que se ha ido transformando y modificando a la par que iban cambiando las circunstancias históricas (por ello, cuando explicamos las distintas formas de liberalismo, más que hablar de distintas corrientes como es en el caso del socialismo preferimos hablar de distintas formas de liberalismo dependiendo de la época: liberalismo del siglo XVIII o liberalismo ilustrado, liberalismo del siglo XIX o decimonónico, liberalismo del siglo XX o neoliberalismo).

¿Qué es el liberalismo?

Una ideología política que afirma que todo individuo es el único dueño de sí mismo, de su vida y de su destino, y que por lo tanto no puede estar subordinado ni sometido a ninguna instancia externa (ya sea la sociedad o el Estado). Es por esto por lo que para los liberales, y de ahí su nombre, la condición natural de los seres humanos es la libertad (ningún hombre nace sometido a un poder exterior o a una autoridad ajena).

Además, como esta característica, la libertad de cada cual, es la misma para todos los seres humanos, los liberales fueron los primeros que afirmaron y defendieron la igualdad de todos los hombres.

En la historia de las ideas políticas toda afirmación (en este caso, la igualdad de los individuos y su libertad) se hace en oposición a otra idea política de signo contrario. ¿con qué ideas se confrontaron las afirmaciones de que todos los seres humanos nacen libres e iguales? El liberalismo surgió en el siglo XVIII (su nacimiento se produjo en Inglaterra a finales del siglo XVII cuando se produce la “unbloody Glorious Revolution” o Gloriosa Revolución No Sangrienta de 1688 por la que Inglaterra se convierte en la primera monarquía constitucional-parlamentaria de la historia). En aquella época, la sociedad seguía siendo una sociedad feudal (aunque el feudalismo se encontraba ya en su última fase, en la fase inmediatamente anterior a su extinción):

A)     El poder lo detentaba de un modo absoluto el monarca (por eso era “el soberano”, el que detentaba la soberanía o poder supremo)

B)     Era una sociedad estamental (la sociedad estaba dividida en estamentos: nobleza y vulgo) y por ello estructuralmente desigualitaria.

C) La economía estaba organizada en torno a las corporaciones gremiales, los monopolios estatales y los privilegios feudales de los grandes terratenientes. Todo ello hacía imposible el desarrollo económico y la creación de riqueza (un ejemplo de ello eran las corporaciones gremiales que eran una traba para el desenvolvimiento de una eficiente economía de mercado).

D)    Seguía siendo una sociedad profundamente religiosa: la religión en aquella época era el gran instrumento ideológico que impulsaba el conformismo social: nuestro destino en la Tierra es sufrir y padecer para luego en el cielo poder disfrutar de la felicidad eterna)

E)     Finalmente, para la sociedad feudal (al igual que sucede en todas las sociedades tradicionales pre-modernas, todo hombre nace sometido a una autoridad ajena: todos los hombres son siervos de alguien; hasta los príncipes, que lo son de Dios).

Pues bien, el liberalismo defenderá una concepción de la sociedad y de la vida humana radicalmente opuesta a la que estuvo vigente en Europa durante siglos (todo el larguísimo periodo que corresponde al Antiguo Régimen que comprende desde el siglo XI, cuando finalizan las invasiones bárbaras y se descompone definitivamente el imperio de Carlomagno, hasta finales del siglo XVIII cuando se produzca la Revolución Francesa). La idea principal del liberalismo es que los individuos son dueños y señores de su vida y sólo a ellos les corresponde decidir cuál es su destino. Es decir, los hombres son libres y ni la sociedad ni su representante político legítimo, el Estado, tienen derecho a poner trabas a esta libertad. Por ello, para los liberales es indispensable que la sociedad y las instituciones políticas (el gobernante y la administración estatal):

1º reconozcan que los individuos tienen derechos (libertades)

2º se comprometan a respetarlas y a protegerlas.

Además del reconocimiento de los derechos, los liberales exigen del Estado que resuelva a través de la administración de justicia:

- los conflictos y querellas que se producen inevitablemente entre los ciudadanos

- y que dicha resolución judicial sea justa (esto es, imparcial).

3º En tercer y último lugar, además de libertad y seguridad (seguridad jurídica, seguridad de que los conflictos se resolverán imparcialmente tal como establecen las leyes y pacíficamente), los liberales quieren también fiscalizar las cuentas, los gastos que realiza el Estado y, sobre todo, quieren controlar el funcionamiento del mismo Estado (controlar a los gobernantes). ¿Por qué desean hacerlo? Porque los liberales temen al Estado. ¿Por qué? El Estado es el mayor enemigo de la libertad de los individuos y, además, un Estado despótico no administra una justicia imparcial (los privilegios sociales tienen su fundamento último siempre en la tiranía política). Es por ello por lo que los liberales van a diseñar un modelo de Estado en el que es imposible que el un gobernante se convierta en un déspota.

¿Cuáles son las características del Estado liberal?

1º La división de poderes: el poder del Estado tiene que estar dividido, troceado, para que así el gobernante no disponga de un poder absoluto ya que “el poder absoluto corrompe siempre”. ¿Cómo logra frenar la corrupción y el abuso la división de poderes? Porque dicha división impone un sistema de pesos y contrapesos (checks and ballances) en virtud de los cuales los tres poderes del Estado se controlan mutuamente y equilibran entre sí (por ejemplo, una de las funciones del Parlamento es en unas sesiones específicamente dedicadas a ello controlar al gobierno a través de preguntas al primer ministro y a los ministros que tienen que rendir cuentas de su acción de gobierno ante los diputados electos.

 El poder legislativo reside prioritariamente en el Parlamento: el Parlamento es una cámara integrada por los legítimos representantes de la ciudadanía. La función del Parlamento es redactar la Constitución y promulgar las leyes ordinarias (civiles, penales, fiscales, etc.).

3º El Parlamento tiene primacía sobre el gobernante: dicha superioridad jerárquica implica:

a)      Los gobernantes no están por encima de las leyes que promulga el Parlamento sino que tienen el deber de someterse a ellas (de cumplirlas y hacerlas cumplir)

b)      El Parlamento, como acabamos de ver más arriba, controla al gobierno quien tiene que rendir cuentas ante el Parlamento.

4º Las leyes tienen que ser acordes con la opinión pública mayoritaria: las leyes tienen que ser expresión de la voluntad popular o al menos de una mayoría social.

            Como vemos, la finalidad de la concepción del estado del liberalismo es la defensa del individuo y sus derechos frente al poder público (en EEUU, esa defensa legítima que los individuos puedan portar armas tal como ello queda recogido en la segunda enmienda de la constitución norteamericana).

Finalmente, los liberales defienden:

1º Las Iglesias (las organizaciones religiosas) no pueden coartar la libertad de los individuos. Por ello, el liberalismo ha defendido siempre:

a)      La separación Iglesia/Estado (el primer país en hacerlo fue EEUU)

b)      La tolerancia religiosa: la prohibición expresa de que se pueda perseguir, atacar o combatir a cualquier congregación religiosa (consagrándose por ello la libertad de conciencia religiosa como uno de los principales derechos inviolables del individuo). La tolerancia religiosa hará posible que las sociedades sean cada vez más plurales (pluralismo primero religioso y luego político y moral de las sociedades democráticas liberales).

2º Las corporaciones (los gremios) defienden privilegios o intereses corporativos particulares siendo también una traba para el ejercicio de la libertad individual, de la iniciativa económica de los individuos y de su capacidad de trabajo. Por ello, las corporaciones tienen que ser eliminadas y, si ello no es posible, restringidas: la única economía acorde con la sociedad liberal es la economía de mercado libre.

. “La política es un mercado. Y no es un reproche, sino un halago. La competencia, al votar o al comprar frutas y verduras, beneficia a los consumidores. La alternativa al mercado, en la economía y en la política, es el oligopolio o el monopolio; la dictadura de los privilegiados. Democracia y capitalismo, por más que duela a muchos idealistas, comparten el mismo principio rector: la pelea justa por el favor de los clientes. Y los mismos enemigos: los holgazanes, políticos o corporativos, que quieren mantener sus prebendas sin esforzarse.” (Víctor Lapuente, en una columna de opinión en el diario El País).

 

 

 

EN CONCLUSIÓN, éstas son las características propias del Estado liberal:

H)     DERECHOS Y LIBERTADES CIVILES (LIBERTADES INDIVIDUALES)

I)        SEGURIDAD JURÍDICA (ESTADO DE DERECHO CONSTITUCIONAL)

J)       DEMOCRACIA (DEMOCRACIA PARLAMENTARIA)

K)      ECONOMÍA DE MERCADO LIBRE (CAPITALISMO)

Hablemos brevemente de la relación entre el liberalismo político y el liberalismo económico (el capitalismo). Aunque se tiende (a veces, tendenciosamente) a confundirlos, no son exactamente lo mismo: el liberalismo político es una teoría acerca de cómo hay que organizar el poder público, el poder del Estado, mientras que el liberalismo económico trata acerca de cómo hay que organizar la economía de un país para que ésta sea eficiente y productiva.

La principal tesis del liberalismo económico fue formulada por Adam Smith en el siglo XVIII en su obra “La riqueza de las naciones”. En dicha obra, Adam Smith afirmaba que la principal causa de la riqueza de un país no está en sus recursos naturales (campos, minas, metales preciosos; hoy diríamos, reservas petrolíferas como las que hay en Venezuela) sino en sus recursos humanos (el trabajo) y en cómo éstos están organizados (cuanta más especialización y división en el trabajo haya, y más se fomente el comercio, los sistemas económicos serán más eficientes). Para Adam Smith, finalmente, quien debe regular la producción y distribución de bienes y servicios es el mecanismo impersonal de los mercados, es decir, la libre competencia. Finalmente, la competencia entre los agentes económicos y el afán de lucro (el deseo de ganar más dinero) son las principales causas del progreso económico y social de las naciones (para lograr la libre competencia había que abolir los gremios y los monopolios estatales).

CONCLUSIÓN: aunque el liberalismo político y económico no son lo mismo, los dos sistemas se complementan entre sí. ¿Porqué? Porque para el liberalismo político el único sistema económico que no coarta la libertad de los individuos (sino que incluso la fomenta) es la economía de mercado libre (libertad de empresa, libertad de competencia, libertad de trabajo). Para los teóricos del liberalismo económico, el único sistema político que no es un peligro (existe la seguridad jurídica necesaria para hacer negocios) y fomenta la libertad de mercado es el parlamentarismo liberal.

Sin embargo, como veremos seguidamente al hablar del socialismo, esta complementariedad no está exenta de problemas. El problema principal es que, aunque los liberales afirman que todos somos iguales, lo cierto es que la sociedad liberal se vuelve muy desigualitaria (una nueva forma de desigualdad muy diferente a las desigualdades existentes del pasado, del esclavismo y la servidumbre). ¿En qué consiste la nueva desigualdad? La sociedad se va a dividir de hecho en dos nuevos tipos de personas (en dos nuevas clases sociales): los ricos propietarios y los asalariados. Pues bien, pronto se comprobará que el nuevo modelo social (político y económico) sólo beneficia a los propietarios, mientras que a los asalariados les toca padecer y sufrir las consecuencias negativas del nuevo sistema: migración, largas jornadas laborales, durísimas condiciones laborales, inseguridad, accidentes laborales, paro…).

 

EL SOCIALISMO (2º Y DEFINITIVA APROXIMACIÓN)

A lo largo de todo el siglo XVIII y durante la primera mitad del siglo XIX se produjeron una serie de cambios y transformaciones políticas (Gloriosa Revolución No Sangrienta inglesa de 1688; Revolución americana de 1776; Revolución Francesa de 1789; ciclo de revoluciones liberales de la primera mitad del siglo XIX: 1830-1848),económicas (implantación del capitalismo industrial y Revolución industrial) y culturales (las nuevas ideas de la Ilustración del siglo XVIII y del Romanticismo) que transformaron completamente a la sociedad europea: la antigua sociedad feudal, el Antiguo Régimen llegó a su fin y una nueva sociedad hizo su aparición: la sociedad liberal capitalista burguesa, la sociedad moderna, la sociedad que aún con sustanciales cambios está vigente hoy en día. La nueva sociedad se va a caracterizar por:

1º Su extraordinario dinamismo económico: efecto de la expansión del maquinismo, del industrialismo; al no ponerse trabas a la actividad económica, la nueva sociedad se va a caracterizar por su extraordinaria capacidad de crear riqueza.

2º La desaparición de los estamentos sociales, es decir, de la servidumbre, hará posible el que se produzcan unos movimientos migratorios extraordinarios (del campo a la ciudad y de Europa a América; en un siglo, 45 millones de europeos emigrarán a américa).

Todos los cambios y transformaciones que se llevaron a cabo hicieron posible el surgimiento de una nueva sociedad, eminentemente urbana, industrial, en la que la principal diferencia entre sus miembros era económica. Por ello, a partir de este momento, la sociedad se divide en dos tipos de hombres:

A)  La clase de los propietarios: comerciantes, dueños de empresas, personas que ejercen profesiones liberales como la medicina o la abogacía.

B) La clase de los trabajadores: los no propietarios, los desposeídos.

Pues bien, la gran contradicción de la nueva sociedad, de la nueva sociedad moderna es:

1º aunque se crean ingentes cantidades de riqueza (de bienes de consumo; riqueza suficiente para que vivan satisfactoriamente todos los miembros de la sociedad y todos puedan cubrir sus necesidades básicas sin que nadie se vea obligado a vivir en la pobreza), la mayor parte de la sociedad, como todos aquellos que integran la clase trabajadora, viven en condiciones de miseria. El problema aquí es que el capitalismo crea riqueza, pero no es capaz de repartir correctamente la renta nacional (esta es la causa de que la nueva sociedad sea tan desigualitaria).

2º Aunque la nueva sociedad había liberado a los hombres de la servidumbre 8de ser siervos de la gleba) como una forma de semiesclavitud vigente en Europa durante mil años, lo cierto es que los trabajadores de la nueva sociedad industrial no se sentían hombres libres. Por el contrario, consideraban que se les habían puesto unas nuevas cadenas, que soportaban una nueva forma de esclavitud: la esclavitud capitalista, la esclavitud moderna. ¿En qué consiste dicha nueva esclavitud? Los trabajadores son mercancías (y como tales mercancías se compran y se venden).

            Pasemos seguidamente a explicar cuáles son las principales tesis de la ideología política socialista:

1º el socialismo considera que el capitalismo, la sociedad capitalista, es un modelo de organización económica y social aborrecible. ¿Por qué aborrecible? Porque el capitalismo es el responsable de las siguientes lacras sociales (no olvidéis que la situación a la que se refieren es la que los trabajadores padecieron sobre todo en la primera mitad del siglo XIX; luego las condiciones de vida y laborales fueron sustancialmente mejorando y de ahí que la mayoría de los partidos socialistas, aunque seguían siendo en teoría revolucionarios, en la práctica se hicieron reformistas)  :

a)      Una extraordinaria desigualdad social entre la clase de los capitalistas, de los propietarios, y la clase de los asalariados, los no propietarios, los trabajadores. ¿En qué consiste dicha desigualdad social? No es una desigualdad jurídica ni estamental (en la sociedad capitalista todos somos iguales ante la ley y los estamentos sociales han sido abolidos; ello fue efecto de la abolición del Antiguo Régimen tras las revoluciones liberales de finales del siglo XVIII y primera mitad del siglo XIX). ¿A qué desigualdad social se refieren entonces los socialistas?

1.      A la desigualdad de riqueza y de ingresos: la extraordinaria riqueza que genera el capitalismo y el industrialismo se acumula en manos de los capitalistas. ¿Y qué les queda a los trabajadores? La pobreza, una pobreza extrema en un primer momento, los famosos salarios de hambre, y una pobreza mitigada conforme las condiciones de vida de los trabajadores fueron mejorando gracias a las luchas del movimiento obrero (los sindicatos). En conclusión, el primer problema del capitalismo es, por lo tanto, un problema de distribución de la renta.

2.      Desigualdad de oportunidades: aunque las posiciones sociales estén abiertas a todo el mundo (nada prohíbe que el hijo de un obrero llegue a ser médico, abogado…), los trabajadores no disfrutan de oportunidades para poder ocuparlas. ¿Por qué carecen de oportunidades? Porque carecen de la formación requerida para desempeñar dichas funciones. ¿Por qué no tienen dicha formación? Porque son analfabetos (están condenados a comenzar a trabajar desde que son niños).

3.      Desigualdad de poder: la riqueza de los capitalistas y la situación de dependencia y necesidad en la que se encuentran los trabajadores con respecto a los capitalistas les confieren un enorme poder a éstos (a los empresarios o capitalistas; se les denomina así, capitalistas, porque ellos son los dueños del capital: de las fábricas, de las minas, de los recursos naturales en general; también son ellos los que gestionan la riqueza que se guarda en los bancos; a estos últimos se les denomina capitalistas financieros o banqueros). Por efecto de ello, los capitalistas tienen un enorme poder sobre los trabajadores. ¿Para qué utilizan ese poder? Para explotarlos.

b)      La segunda lacra del capitalismo después de la desigualdad de la que acabamos de hablar, es la explotación de los trabajadores. Los trabajadores son los esclavos de esta nueva sociedad. Por ello, aunque legalmente está prohibida la compra y venta de personas, los trabajadores van a ser considerados y tratados como una mercancía más (y por ello, en cierta medida, comprados y vendidos).

c)      Para terminar, la tercera gran lacra del capitalismo es que la sociedad capitalista es una sociedad competitiva (y por ello insolidaria), individualista (fomenta el egoísmo de sus miembros y no su espíritu comunitario), y materialista.

En conclusión: la desigualdad económica existente en la sociedad capitalista conlleva una desigualdad en el poder de cada una de las clases que hará posible la dominación de una clase por otra, la dominación del a clase de los trabajadores por parte de la clase de los propietarios. Dicha dominación hará posible la explotación y opresión del trabajador. Esta dominación no se hace a través de la coerción física (de la violencia) sino a través del sutil mecanismo del mercado que convierte al trabajador en una mercancía, en una cosa que puede ser manipulada a su gusto por los capitalistas. Esta es también para los socialistas la causa de la deshumanización de la sociedad moderna. Además, finalmente, para los socialistas la sociedad liberal-capitalista no es una sociedad democrática, aunque en ella haya elecciones, constitución o parlamentos. ¿Por qué razón? Porque en dicha sociedad existen clases sociales y, según ellos, sólo una sociedad sin clases puede llegar a ser una sociedad verdaderamente democrática.

 

¿Cómo se resuelven todas estas lacras de la sociedad capitalista?

Llevando a cabo profundas, radicales, revolucionarias reformas socioeconómicas, fundamentalmente en el ámbito de la propiedad y la distribución social de la riqueza.

¿Qué sistema económico defienden los socialistas? El siguiente:

1º Un sistema económico en el que ha sido abolida la propiedad privada de los medios de producción (campos, minas, fábricas, barcos…). ¿A quién pertenecen entonces los medios de producción? Los medios de producción serán socializados pasando a pertenecer a la sociedad entera. Quien gestionará, en nombre de la sociedad, dichos medios de producción será el Estado. De ahí que en realidad en nuevo y único propietario será el Estado. El Estado es la organización que detenta el poder político y que representa y defiende los intereses de la sociedad entera. Ejemplo de ello sería, aún hoy en día, Cuba.

2º Control de la inversión por parte del Estado. ¿Quién controla la inversión en el sistema capitalista? La banca. Por ello, los socialistas abogan por la nacionalización de la banca (sólo existe la estatal).

3º Una distribución más equilibrada entre los individuos de los ingresos y la riqueza. Si una de las características de la sociedad capitalista son las tremendas desigualdades económicas, el socialismo aboga por una sociedad más igualitaria.

4º Elección democrática de los dirigentes: el socialismo ha defendido siempre que todos los dirigentes políticos como los gestores económicos (los directores de las empresas) sean elegidos democráticamente por el pueblo (en el caso de las fábricas, por los trabajadores de éstas). El socialismo es, por definición, democrático. Sin embargo, hay formas de socialismo que rechazan la elección democrática de los dirigentes políticos. Es el caso del comunismo (del leninismo o “marxismo-leninismo”), el régimen político establecido en Rusia tras la revolución de 1917 y que dio lugar al nacimiento de la URSS.

5º Los comunistas defienden, además, la planificación centralizada de la economía. Aquí, el gobierno controla no sólo la inversión sino todo el proceso económico (qué se produce, en qué cantidad, a qué precio). Los socialistas que no defienden la centralización de la economía, mantienen que estos asuntos económicos sean regulados por la ley de la oferta y la demanda, por el mercado.

De estas cinco características, sólo la 1º y la 2º son condición suficiente y necesaria del socialismo. Respecto a la 3º, la mayor igualdad, hay acuerdo, pero no acerca del modo cómo hay que llevar a cabo la redistribución de la riqueza:

1º “A cada uno por igual”

2º “A cada uno según su esfuerzo”

3º “A cada uno según sus necesidades” (Carlos Marx)

            Las elecciones democráticas (la elección de los dirigentes políticos y de los gestores económicos) es también un rasgo común del socialismo, pero allá donde ha habido planificación centralizada (ya no digamos, socialismo militarizado: leninismo, maoísmo…), la democracia se ha marchitado. La planificación centralizada es la característica más controvertida. ¿Qué hay en ella de positivo? Remedia lacras del capitalismo como son:

1º los monopolios

2º las crisis económicas cíclicas

3º el desempleo

4º desigualdad en el reparto de la riqueza y el despotismo en el trato de los trabajadores.

Según algunos teóricos del liberalismo, la planificación centralizada nunca tendrá ni mejorará la información inherente y disponible en un sistema de economía de mercado (el mecanismo de los precios). Tampoco los dirigentes o encargados de las empresas de una economía centralizada tendrán la motivación de los empresarios de una economía de mercado: el beneficio privado.

El debate entre socialismo y liberalismo llegó a su fin tras la 2º Guerra Mundial, al menos en Europa Occidental (no así en Europa Oriental bajo el yugo soviético y en USA donde el socialismo es anecdótico). ¿Qué es el Estado del Bienestar? Una sociedad que es un 50 % liberal y un 50 % socialista. ¿Por qué liberal? Porque el modelo político vigente es el de la democracia liberal (Constitución, Estado de derecho, división de poderes, parlamentarismo, democracia representativa indirecta…). El modelo económico también es el liberal (economía de mercado, libertad de empresa, libertad de trabajo…). Sin embargo, el Estado tiene derecho a redistribuir entre toda la población casi la mitad de la riqueza dela nación (un 40 % de media; en España es el 35 %). Este Estado redistribuidor es un Estado socialista (al que se denominará Estado social). ¿Cómo lleva a cabo dicha redistribución? El Estado tiene derecho a expropiar la mitad de la riqueza de la nación a través de un sistema impositivo progresivo (a través de los impuestos, siendo quien más paga los más ricos o los que más consumen) y utiliza esos recursos (esa riqueza) para financiar toda clase de servicios sociales (fundamentalmente sanidad, educación y seguridad social).